Generalmente las empresas de seguros ofrecen con diferentes coberturas, adaptándose al perfil del usuario que las demanda. Esto ocurre por el hecho de que no todas y cada una de las personas tienen exactamente las mismas necesidades, algo que las empresas aseguradoras conocen realmente bien. El Seguro de Salud no es una salvedad, puesto que entiende a individuos de diferente rango de edad, con situaciones personales diferentes y con unas necesidades económicas variadas.
Por este motivo, existen diferentes géneros de póliza sanitaria, entre ellas: sin copagos y con copagos. Las pólizas médicas sin copagos te dejan acudir a todas y cada una de las clínicas y doctores incluidos en el cuadro médico de la empresa de seguros, esto es, aquellas con las que tiene un pacto, sin abonar nada por las consultas. Abonar una prima mensual te da derecho a gozar de los servicios incluidos en sus condiciones.
Sin embargo, con el seguro con copagos sí que debes abonar un costo por las visitas al médico que efectúes. Esta cantidad de dinero se aúna a la prima del seguro que se debe abonar por mes siguiente, con lo que el pago mensual puede ser diferente, en dependencia del empleo que se haya dado a los servicios incluidos en la póliza.
Inconvenientes y ventajas del copago sanitario
Ciertas personas que usan en menor cantidad el seguro médico privado, prefieren pólizas en las que solo se pague por el empleo que le dan y otras en cambio, prefieren estar protegidas en todos y cada uno de los casos. En caso de que seas de los primeros, los seguros con copago acostumbran a ser más económicos que los sin copago, con lo que pueden favorecerte si lo que quieres es ahorrar.
Por si fuera poco, asimismo favorecen a los usuarios que prefieren asistir a especialistas privados como por servirnos de un ejemplo ginecólogos, reumatólogos o bien traumatólogos, que pueden tener unos tiempos de espera superiores en la seguridad social. Con esta clase de seguro, las visitas salen más asequibles que si se efectuasen sin ningún género de póliza sanitaria.
Por otra parte, esta póliza asimismo favorece a aquellas personas que no asisten frecuentemente al médico. Si eres de los que va contadas veces a la consulta del doctor, es posible que te compense abonar solo por las visitas que efectúas.
Sin embargo, si padecieses una enfermedad grave, las visitas al médico se podrían multiplicar. En un caso así, el costo del seguro aumentaría substancialmente y es posible que ya no compensase la modalidad con copagos, en tanto que podría lograr un coste muy elevado. En un caso así, ciertas empresas de seguros imponen un límite de costo por año en copagos y si el asegurado llegara a superarlo, no debería proseguir pagando por sus consultas.
¿Qué costes pueden tener los copagos?
Los costes de los copagos y de la prima del seguro dependen de cada compañía de seguros. En determinadas pólizas el copago cambia conforme el servicio médico que se utilice. Una visita al médico de cabecera, por poner un ejemplo, es posible que no tenga exactamente el mismo costo que una consulta con un especialista del corazón.
Sin embargo, otras compañías de seguros pueden ofrecer una póliza con copagos establecidos, en los que se paga lo mismo en todas y cada una de las visitas, tratamientos o bien pruebas, con independencia de la especialidad.
Equipara tu seguro ya antes de contratarlo
Ya antes de contratar un seguro de Salud con copago es esencial que aparte de cotejar el coste de la prima que vas a pagar mes a mes, verifiques asimismo cuál va a ser el importe que deberás abonar por los copagos. Es posible que contrates un seguro baratísimo, mas que tenga los costos de los servicios médicos muy elevados. Para seleccionar la póliza sanitaria que más te es conveniente, puedes emplear un comparador de seguros online, con el que vas a poder ahorrar tiempo y dinero.